sábado, 27 de febrero de 2010

Chávez y su pandilla dan un golpe cada semana: hay que insurgir!

Se reune la pandilla bajo la mirada impotente de Bolívar.
Ya algunos de los hampones que están en esta foto fueron
botados por el hampón mayor. Cosas entre ellos.




En las últimas dos semanas Chávez ha dado dos golpes de estado, en la mas precisa acepción del término. El primero en el Zulia, el segundo en el Táchira.

Lo que ha pasado con el alcalde del Municipio Sucre del estado Zulia es una grosera violación a la constitución, un mini-golpe de estado en el cual la sala electoral del llamado Tribunal Supremo de Justicia, en manos de hampones disfrazados de magistrados, decidió anular la elección del alcalde hecha en 2008 y designar a un chavista como “alcalde encargado” a pesar de que, en todo caso, quien debería encargarse de la alcaldía es el presidente del Concejo Municipal, segun lo dicta la ley.


Cuál es la “razón” alegada? Que el dueño de la casa donde vive el alcalde debe Bs. 1200 en impuestos municipales y, por lo tanto, el alcalde es “solidario” de esta mora.

El otro golpe recientemente asestado a la democracia y a los derechos humanos es el caso del Gobernador de Táchira, César Pérez Vivas. Al Gobernador Pérez Vivas le han instalado un gobierno paralelo al mando del hampón Rafaél Ramírez, llamado “Consejo Revolucionario de Gobierno”. Ramírez es Ministro de Energía, Presidente de PDVSA, Vicepresidente del PSUV-Occidente y ahora jefe de ese gobierno paralelo hamponil, el cual desconoce la designación popular del gobernador. El dinero que se le debía dar por ley a la gobernación ha sido transferido a este consejo de hampones.

A etos hampones hay que sacarlos del poder, el cual ejercen de manera arbitraria y grosera. Pienso que los venezolanos deben ir a una huelga general indefinida, paralizar al país de una vez por todas, arriesgarlo todo, hasta que estos hampones salgan del poder y sean llevados a prisión, el sitio donde deben estar.

Mientras esto sucede en Venezuela y el país se derrumba física y espiritualmente los embajadores de Chávez continúan cantando sus loas y elogiando la “democracia”venezolana”, como es el caso del desvergonzado Roy Chaderton y del sifrino invertebrado Alfredo Toro Hardy, ex-miembros del equipo de la democracia, pasados con dedicación de celestinos al equipo de los déspotas. Este par y otros de menor categoría intelectual pero de la misma calaña moral, como Gustavo Marquez en Colombia, el cuatrisoleado Lucas Rincón en Portugal y el mensajero de Zelaya, Arias Cárdenas, son vulgares cómplices por omisión de los crímenes de este régimen y deberán ser juzgados penalmente con toda severidad. Moralmente ya están siendo juzgados y condenados.

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