martes, 25 de octubre de 2011

Carta de Esteban para Navarrete

Esteban se sentó en su escritorio y comenzó a escribir.

Mira, Navarrete:

Estoy muy dolido por lo que has hecho. No hubiera pensado que un camarada, un amigo de la familia, pudiera salir con lo que has salido. A mi angustia le añades la traición. Como decía Nietzche en el prólogo a su Zaratustra (no he pasado de allí): “Has evolucionado de gusano a hombre pero mucho de tí es todavía gusano”. Más que hipocrático has salido hijoepútico.

Me llamas falsamente bipolar. Deberías saber que siempre he rechazado la bipolaridad. Soy multipolar como lo dije en las Naciones Unidas, cuando insulté a Busss y denuncié el asesinato del tatatarabuelo de Evo Morales a manos de los españoles. Bastante me aplaudieron.

Y sabes por qué? Sigo citando a Nietzche: “Porque soy un ser superior”. Los Cubanos lo saben y por eso confío en ellos. Tu has querido rebajarme a la condición de un hombre ordinario. Manejo mi enfermedad como un esquema Ponzi. Como decía el Ché al hablar de Cuba, me mantengo un paso por delante del caos.

Como tu no juegas pelota, seguramente no sabes quien era Satchel Paige. El dijo: “Camina rápido y no volteés para atrás porque alguien te puede estar alcanzando”. Sigo su consejo, camino rapidito.

No me conoces, Majarete.Tendrás ocasión de arrepentirte de haberme condenado a muerte apoyado en los chismes de mi propia gente. Tu cuento del sarcoma estimulará la pugna entre quienes tratan de reemplazarme. Fidel nunca ha mencionado esa palabra.

Y es que los Cubanos me aman, por eso confío en ellos. Tu me odias, a pesar de tanto pisillo de chiguire que comiste en Barinas, o quizá por eso. Fidel me ama porque sabe que mientras yo esté vivo le llegarán sus cien mil barriles diarios de petróleo, más los otros regalitos en efectivo, como los $150 millones que le mandé el año pasado.Tienen incentivo para amarme. Tu no, porque no te nombré ministro. Preferí a la Coronela Sáder, porque ella siempre me da la razón. Tu me discutes y no hay nada que me altere más que eso.

Cuando me discuten y me critican me arrecho y me provoca estrangular a alguien, a tantos hijo de….Edecán, Agarránmelo para jodelo…. Edecán, EDECÁAAAN……. Agárremelo que lo jodo….Es que lo mato, al majarete ese…

“Comandante-Presidente, cálmese”, acudió presuroso y sudoroso el edecán. Le susurró al soldadito de guardia, “llame al Cubano de inmediato, que se traiga la inyectadora … ya le entró otra vez la bipolaridad al jefe.. ah, y que se traiga una muda de pañales, porque de verdad está como un niño”.

“Y pensar” se dijo el edecán, “que aún falta un año para las elecciones. Esto no me lo calo yo”.

NOTA:  No hay tal carta, por supuesto. Es un ejercicio de ficción que trata de aproximarse a la realidad.

1 comentario:

CharlesC dijo...

Mr. Coronel,
Very beautiful "love letter" de Esteban.
All blessings to you again for a
wonderful job.
Reminds me of Shakespeare play.
(I do think there is/was a love/hate relationship maybe within
Navarette?)